
La Paz, 1O de octubre de 2020
Boya.News – La presidenta transitoria Jeanine Áñez culminó el sábado 10, día 35 de la campaña electoral, otra semana de ataques cada vez más furibundos contra el MAS y su candidato Luis Arce, y, con especial énfasis, contra Evo Morales.
Fue también otra semana de uso indisimulado de recursos públicos -viajes, actos y radio-televisión estatales- para reforzar la “contracampaña” orientada a captar todos los votos posibles para impedir una victoria del MAS en las elecciones del 18 de julio, para las cuales el partido de Arce y Morales seguía apareciendo como favorito en las encuestas.
Áñez llamó a cumplir la responsabilidad de “votar por aquella persona que tenga las mejores condiciones y que no permita que Evo Morales y el Movimiento Al Socialismo nos vuelvan a gobernar”.
La oportunidad del nuevo episodio de la “contracampaña” electoral de Áñez fue la inauguración de un servicio de telecomunicaciones en San Borja, Beni.
Lejos del papel de gobernante transitoria e independiente que prometió asumir tras bajarse de la carrera electoral, Áñez estaba convertida en una radical activista antimasista que aprovechaba cuanta oportunidad le daba el poder para atacar al MAS, a su candidato y al expresidente derrocado.
El discurso antimasista era replicado al mismo tiempo por varios ministros y otras autoridades.
Editor/Boya